"3MPH (HORSE TO ROCKET)" - ANN-SOFI SIDÉN

Nota de prensa


Inicio: 24-10-2003 - Fin: 02-12-2003

 

Antecedentes:

El 7 de julio de 2002 Siden partió del centro de San Antonio en lo que sería un viaje de 25 días a lomos de un caballo. Cabalgando en un Appaloosa castrado de 15 años viajó hacia el este a una velocidad de 3 millas por hora, cubriendo 440 km. Para alcanzar el centro espacial lindón B. Joson en Houston, Texas. Siden fue acompañada por Paul Giangrissi, su marido, quien fue explorando las rutas con un día de antelación en un RV que, a su vez, serviría como base de operaciones y campamento nocturno.

La pieza surgió de una simple cuestión: cómo resultaría investigar a fondo un viaje a lomos de un caballo, modo de transporte obsoleto, y llevar a cabo un peregrinaje a un centro y una institución donde el futuro de los viajes tiene el potencial de evolucionar más allá de los confines de la atmosfera terrestre. Una yuxtaposición que permite llevar a cabo un análisis sobre el tiempo y la velocidad.

Imagina la percepción que podría tener un conductor cualquiera descubriendo desde su ventanilla el lento paso de un caballo y su jinete por la autopista, con el paisaje al fondo.

3MPH es un scan en movimiento de derecha a izquierda de 35 minutos de duración, que ofrece sensación constante de movimiento en avance.

Realizado en 5 proyecciones, es el viaje a lomos de un caballo entre 2 ciudades americanas, abriéndose a una extensa visión llanuras y a los desarrollos del un paisaje en permanente cambio. Se atraviesan suburbios, campos, pequeñas ciudades granjeras, carreteras olvidadas, centros comerciales urbanos, así como vendedores de coches, lectores de biblias, para entrar finalmente en las propiedades de la NASA, donde el jinete y el caballo pasan brevemente por la carcasa inmensa y vacía de un cohete situado sobre tierra verde.

Gracias al empleo de una intensa mezcla de imágenes en movimientos, fotogramas y sonidos ambientales, Siden atrapa al espectador en una atmosfera de presencias inmediatas que se resuelve a si misma permitiendo que las imágenes discurran por sí mismas.

El caballo y el jinete aparecen por primera vez en un cruce, a la espera de poder atravesar el tráfico. El viaje continúa con los ecos de los cascos del caballo fundidos con el ruido de los coches provenientes de la autopista, hasta llegar a un barrio de Afroamericanos en las afueras de San Antonio en el que los niños, curiosos, y sus familiares se relajan en sus tierras.

En el campo las caras se transforman en las propias de los nativos; granjeros, vacas, caballos y perros que ladran constantemente.

Se analiza la variedad social y cultural en la Texas moderna, su infraestructura y la gente en su propio entorno se ponen en primer plano; imágenes mundanas pero ricas en detalles, traídas junto con el caballo y su jinete.