Nota de prensa

Trashumancia reúne el último cuerpo de trabajos de Irene Infantes (Sevilla 1989). El título de la exposición alude a la técnica de pastoreo donde el ganado transcurre por las dehesas de Norte a Sur, alimentándose y adaptándose al espacio y a los ciclos climáticos. Siempre en continuo movimiento, modificando el terreno perpetuamente, un ciclo que no acaba si no que renace constantemente. La obra de Irene Infantes se centra en su interés por las transformación de materiales naturales -especialmente en el textil-, y a los diferentes procesos de alteración a los que son sometidos y las consecuencias que se derivan de todo ello.

Los trabajos textiles de Infantes confían en la lana como único material para llevar a cabo sus trabajos, indagando en la versatilidad del material y en la ruta que este tiene hasta su transformación final, convirtiéndolo en un producto mercantil. La lana como material biológico que crece en el cuerpo de un animal vivo y caliente, para más tarde ser comercializado y cuya finalidad es devolver ese mismo calor a otro cuerpo, pero adaptándose esta vez a una nueva superficie. Conservando su esencia más pura pero totalmente modificada.

La lana merino española cobra especial protagonismo en el trabajo de la artista, este tipo de material fue decisiva durante el último estadio de la preindustrialización española en el siglo XV que trajo consigo un desarrollo económico y social en toda la península ibérica. Seis siglos más tarde, esta lana ha sufrido un cambio drástico a la hora de su transformación, pasando de ser un elemento prácticamente de la artesanía al de la producción en masa. Producción que se ha llevado a otros países, existiendo un desplazamiento de la propia raza del animal a nuevos paisajes, climas, alimentos, etc. y originando consecuencias sociales, económicas y ambientales que interesan a la artista. Por otro lado el fieltro, el único textil no tejido que existe, posee también un protagonismo en la obra de la artista, destacando notablemente en los tapices por ser considerado el primer material textil creado por el hombre, mucho antes de aprender a tejer o hilar.

Trashumancia esta compuesta por alfombras y tapices a gran escala que pretenden apartar el material de su practicidad, convirtiendo las piezas en objetos museísticos cuya única función es la de ser observadas. A través de las formas y colores de Pathway I y Pathway II se puede apreciar lo que podrían ser mapas individuales o trozos de un trayecto, un camino. Camino que inspira la ruta que la lana tiene que seguir en el momento que esta es recogida del animal y enviada a países como China para su transformación y limpiado, proceso que consume grandes cantidades de agua y que debido a las regulaciones nacionales deben ser enviada a otros países. En este proceso se pierde la capacidad de posesión sobre ésta, queda en manos de terceros y es distorsionada lejos de su origen para después recibirla totalmente modificada.

Irene Infantes se forma en Central Saint Martins College de la Universidad de Artes de Londres, donde estudia Diseño y Arte Textil (2016). Ha colaborado con marcas tales como Anthropologie USA o Legle Contemporary Ceramics France. Colaboradora con la firma de alfombras de lujo Christopher Farr, Los Angeles, Londres y Nueva York (2016 - 2019 ) Premio Textprint England (2016-2017) Nominación a el Woolmark Prize, París (2017); Ha expuesto en Paris-nord Villepinte, París (2014 - 2017) MoOD, Bruselas (2017), Museo de Arte y Diseño de Hamburgo (2017), Salone del Mobile, Milán (2018) London Design Festival, Londres(2016 - 2018), Matadero, Madrid (2019), Ox Poblenou, Barcelona (2019) Ruthin Craft Centre, Gales (2019)